Salida 12/5/2013 Crónica de San Pancracio (Por cortesía del Pincho)
Soy cociente de no poder llegar a la altura de las crónicas del Gran Van Gogh, pero debido a su ausencia por la cagalera de la distancia, me toca intentar contar los hechos acontecidos en el día de ayer. En el puente nos presentamos un puñao de valientes: Paraolimpico, Marcos Álvarez, Zuri, Canopesca, Canoteam, Carlitoskona, Ervi, Juanra, el Capitán Gancho y el más valiente de todos PEPE MENCHERO, nos se donde esta el autentico biker embajador y súper relaciones públicas de los moros, los chicos con más guevos que una granja de gallinas y moros súper duros que hacen las pruebas más sobrehumanas. Eran las 9,12 horas cuando salíamos hacia la charca por Carija a buen ritmo, llegamos por las traseras del chale de Manolo Casillas cuando había un charco algo negro todos nos salpicamos unos más que otros, cuando Pepe dice ese charco es de un pozo ciego que esta rebosando, “fu… que asco”, seguimos para adelante resignados de nuestras salpicaduras, pero encima el camino esta lleno de minas personales “vamos mierdas de vacas”. Llegamos al río Aljucen y lo cruzamos por el puentecito, nada que ver del cauce del río, con el cauce que llevaba el Jueves Santo. Continuamos paralelos a la vía por un bosque de hierbas altísimas, que casi no dejan ver al moro que va delante y lo que fue un camino hecho por los quads, por suerte en vía de extinción estos últimos. Cogemos el camino que nos lleva a la carretera de la Nava sigue el ritmo trepidante para ganar tiempo, pues la ruta era larga y había que ganar el mayor tiempo posible. En este trayecto llega la caída de nuestro amigo Canoteam “como no”, se levanta y continua es duro como un junco “no es el de berri, sino el de Mérida”. Seguimos hacia Carmonita y el grupo sigue compacto, cruzamos el regato previo a la finca de los toros bravos y seguimos igual sin novedad alguna, llegando a Carmonita el grupo se empieza a fragmentar, Marcos, Carlitos y Canopesca los más fuertes de la jornada cuando el camino se empina, van dejando al grupo, todo lo veo desde la cola del mismo, soy el último en llegar a Carmonita y mientras todos aprovechan para coger agua en pueblo yo continuo, siendo conocedor de mis fuerzas. En el camino hacia el balneario hay un tramo que es un río, es tal el nivel de agua que cuando llego a la curva en la cual hay un puente para cruzar el arroyo, decido pasarlo montado, me cuenta resto que han hecho lo mismo. Llegando al balneario del Trampal soy cogido por las primeras unidades del grupo Canopesca, Carlitos y Marcos, este corono el primero en el alto del Trampal como anda el cabrón pa riva…., vamos llegando a el alto extenuados por el esfuerzo, llevamos 37 Km. y nos queda regresar a Mérida. Juanra se ha ido por carretera desde Carmonita, una vez que nos recuperamos Ervi se da cuenta que ha perdido las gafas y empieza a bajar en busca de las misma, los demás como buenos compañeros solidariamente nos quedamos mirando, como nuestro compañero baja buscando sus gafas, para desistir en su empeño en 200 mts se da la vuelta y comienza a subir de nuevo. Bueno ya los nueve que quedamos empezamos a bajar hacia la nacional 630. Cuando llegamos ha esta después de una bajada trepidante, las primeras unidades esperamos que vayan llegando a el punto de encuentro habitual, pero visto la tardanza a consecuencia de un pinchazo de nuestro amigo Canopesca “el primero de la jornada y el comienzo de los problemas mecánicos de la ruta” es tanto el tiempo que tardan en reparar el mismo que me da tiempo a plantar un pino. Visto el tiempo perdido decidimos continuar por carretera hasta el cruce de las Herrerías, Canoteam pincha y repara. Zuri (aquejado de alergia) y ervi deciden regresar por carretera, el resto después de la reparación del pinchazo de Canoteam continuamos por la carretera de Montánchez, para coger más adelante la Vía de la Plata, a un ritmo de varillaje bajamos hasta que el amigo Canopesca pincha de nuevo, es cuando recibimos un wasap del Yayo en el pajares que donde andamos los de la ruta, se repara un poco más rápido que el anterior y continuamos hacia las gasolinera y se abre un hueco entre los tres más fuertes (Marcos, Carlitos y Canopesca) y los cuatro que quedamos (Paraolimpico, Canoteam, Pepe y yo). Cuando queda un Km. para las gasolineras de la nacional 630 vemos a Canopesca andando “ostia ha pinchado otra vez, joder Cano esto no es normal dice el Juanca y yo mismo”. Empezamos a reparar y vemos que tiene un par de cortes en la cubierta trasera la que había pinchado por tercera vez. Se repara y continuamos a las gasolineras donde nos esperan Marcos y Carlitos este último cuando va ha salir se da cuenta de que esta pinchado y solo infla para llegar a Mérida. Nos quedamos Juanca, Marcos, Carlitos y Yo , cogemos a Cano que había recibido una llamada marchándose por Royanejos hacia la Charca donde le espera los suyos para comida familiar, se despide de nosotros pidiendo disculpas por las continuos pinchazos, no pasa nada amigo, “y pienso como para la próxima salida no cambies las cubierta, te van ha comer los buitres como pinches”. En la bajada hacia Mérida Juanca y Yo “que voy con lo justo o menos cogemos a Josemari y Pepe que van muerto “es el autentico herue de la jornada” lleva sin coger la bici de montaña, ni se sabe el tiempo, a consecuencia de una lesión, esto es un prueba de voluntad y no de entrenamiento, que sirva a todos aquellos que se jartan de poner excusas; no estoy enforma, no cojo la bici, no se me pone dura, etc. Bueno por fin llegamos a Mérida es cerca de las tres de la tardes 74, 98 Km. y 4 horas, trece minutos y seis segundos indica la foto del wasap del cuenta y garmin que hay en mi manillar, cerramos las jornada en el Pajares como no, al final tres supervivientes: Juanca, Carlitos y yo, nos esperan Van Gogh y el Yayo). El próximo domingo algunos moros hemos decidido acompañar a nuestros compañeros de Mérida Bike en su marcha de los 5 lobitos hasta el próximo domingo en el velódromo a las 8,30.-horas, saludos amigos.