Salida 24/06/2012 - Crónicas triatlonas
Como además de la ropa se nos van quedando chicas algunas cosas, decidimos desafiar la lógica y el buen gusto celebrando ni más ni menos que el primer triatlón moro de la historia reciente de España. Con una hora de retraso sobre el habitual horario moro-dominguero, nos dimos cita en lo alto de la presa de Proserpina una serie de “desoficiaos” dominicales: en concreto siete moros practicantes, el Benemérito, el Negociador, convertido para la ocasión en anfitrión de lujo, y un par de invitados aportados por el Paralímpico. Y a todo esto, acompañados por el Mula en el papel de insobornable Juez-árbitro y del Sakamantecas en el papel de reportero más dicharachero de Barrio Sésamo.....y comienza el espectáculo con esos pedazos de cuerpos con moreno-ciclista arrojándose con decisión a la procelosas aguas charqueras (asquerosita de algas y sanguijuelas varias...)...En la muralla, se agolpa gran cantidad de público (...en concreto los triatletas “oficiales” que alegan faltan de depilación adecuada para no participar en el evento y el Ibérico que no está pa estas cosas)....Por lo visto, hay que hacer diez boyas y vuelta y debe ser así porque los fieras van echando agua p´atrás que te cagas....Advierto que por parte de la organización no se ha dispuesto ningún medio de rescate por si aconteciera alguna desgracia natatoria así que, confirmando una vez más mi condición altruista, decido comprobar boya a boya que están bien fijadas cumpliendo con la reglamentación boyera. El lejía se une a mi actividad comprobadora que cumplimos con tal celo que, cuando estamos evaluando la cuarta boya, vienen estos de vuelta a velocidad de crucero...El caso es que, afortunadamente, la totalidad del personal regresa sano y salvo a nuestro medio terrestre habitual, proclamándose el Paralímpico vencedor de la primera posta. Regreso a la muralla y hacemos una transición como Dios manda...., nos cambiamos de ropita, asaltamos neveras para comprobar lo fresquitas que están las latas de cervezas y....salida ciclista. De partida, ya me coloco en una estratégica última posición mientras intento convencer a la cala de que se inserte correctamente en el pedal derecho. Indecisión en el pelotón que no sabe si imponer ritmo de varillaje o espíritu solidario para con los torpes....El caso es que Luis tiene sus más y sus menos con la altura del sillín de su montura prestada para la ocasión, el Benemérito no puede dar más dar sí con bici de montaña al igual que el otro invitado del Paralímpico que, además se deja caer en auxilio del cuñaaaaaaaooooo.....el caso que el grupo se va estirando y aguanto como puedo hasta el circuito de Royanejos donde ya no soy capaz de agarrarme y empiezo a ver las traseras del personal. Resignado a mi suerte, continúo sólo. Un poco más adelante, el Sakamantecas reportero y Angelito con descapotable de la barbi inmortalizan el momento. Sigo viendo a lo lejos al grupo puntero seguido por el Cano. Un poco más adelante, los reporteros cometen una miserable felonía: nos engañan al ínclito Cano y al que esto suscribe desviándonos de la ruta oficial y haciéndonos ocupar momentáneamente la cabeza de la prueba. Posteriormente, cuando soy superado en el descenso de la Cruz por el grupo, se me acusa injustamente de tramposo y me amenazan con poner en conocimiento del Juez-arbitro tan antireglamentario acorte kilometril. Les devuelvo el saludo alegremente, haciéndoles ver con mi dedo corazón enhiesto que estoy totalmente de acuerdo con ellos...un poco más adelante, dan cuenta también del Cano, y llegan como fieras a la meta recibidos por la Culebra aceitosa y el Lintelna que levantan acta del orden de llegada. De nuevo, nos tomamos la transición con mucha calma, rendimos nuevas visitas a las neveras cerveceras y después de un espontáneo acto de exaltación de la enseña nacional, partimos hacia la última de las pruebas, ya con un calor que te rilas. Pantani dice que este tipo de prueba se la tiene prohibida su ginecólogo y se la salta ( es un tío ordenado y aseao donde los haya...el pájaro se echó desodorante después de salir del agua.....) Se da la salida a la carrera a pie y allá que nos vamos a devorar los casi seis kilómetros que definitivamente acaben con nosotros. Pronto la cuestión se va estirando y algunos aguerridos moros toman la delantera. Por atrás, el Paralímpico y su cuñaaaaaooo se lo toman con calma, y en mitad del asunto, me instalo con Carlitos Kona y el Negociador que va refiréndome el kilometraje restante socavando con ello mi frágil moral. Con cuarenta grados acaba el suplicio con el Cano como vencedor. Poco a poco vamos llegando el resto de sonados para, cerveza en mano, bajarnos la temperatura dentro del agua...Tengo que decir que este lamentable espectáculo llamó la atención de varios grupos de ciclistas que pasó por el lugar y que, visto lo visto, no se si van a retirarnos el saludo o, por el contrario, lo van a adoptar entre sus costumbres. En fin, todo muy bien; divertido asunto este del triatlón...Como colofón, majestuosa paella a cargo de Pedro en Chez Melchor.....masiva ingesta de cerveza (como de costumbre, se acabaron las latas), presencia de algunas consortes moras y agradable sobremesa con vasos largos incluidos......Por lo visto, hay quien se ha quedao con ganas de más. Puestos a mejorar la organización......hay que comprar más cerveza.